El Servicio de Cambio Climático (C3S) de Copernicus, el componente de vigilancia del clima del programa espacial europeo, informó este viernes que el verano boreal de este año fue el más caliente registrado en el planeta desde que existen mediciones
La temperatura durante los meses de junio, julio y agosto estuvo por encima de la media para esos meses del verano boreal del periodo 1990-2020 en 0,69 grados centígrados, superando ligeramente el registro de 2023.
En el verano boreal de 2023 la temperatura fue mayor a la media del periodo de 1990-2020 en 0,66 grados, según los datos de Copernicus, que se basan en miles de millones de mediciones tomadas por satélites, barcos, aviones y estaciones meteorológicas de todo el mundo desde 1940.
A nivel hidrológico, “la mayor parte de la región mediterránea y el este de Europa vio unas condiciones más secas que la media” durante el verano boreal, algo que en Copernicus vincularon en algunos casos a situaciones de sequía.
“Fuera de Europa, las temperaturas estuvieron por encima de la media también en México, Canadá, el norte de África, China, Japón y Australia”, además de regiones como el este de la Antártida y el estado estadounidense de Texas.
Por otra parte, la extensión del hielo marino del Ártico fue un 17% menor al de la media para el mes de agosto, un dato que es el cuarto dato más bajo en los registros realizados por satélite disponibles en la serie de datos en la que Copernicus basa sus observaciones.
El nivel de hielo en el Antártico estuvo un 7% por debajo de la media para el mes de agosto, el “segundo menor dato” de la serie, según el comunicado.
Fuente: EFE